Contará con 150 científicos que investigarán proyectos pilotos. Extremadura estará así a la vanguardia europea de la investigación en el almacenaje de energía
Extremadura liderará la transición ecológica. Ayer se dio el primer paso para el funcionamiento del Centro Ibérico de Almacenamiento Energético. Un centro que estará en marcha a finales del próximo año y a pleno rendimiento en 2024. Y será la vanguardia europea de la investigación en el almacenaje de energía, el gran hándicap de las renovables.
Se trata de una infraestructura pionera que se centrará en la investigación y el desarrollo de tecnología de almacenamiento energético y su integración con las energías verdes, en la colaboración con el sector industrial en el desarrollo conjunto de nuevas funciones tecnológicas y en la formación y el asesoramiento en renovables y su gestión.
El proyecto, fruto de la colaboración hispano lusa con la Junta de Extremadura y la Diputación de Cáceres, se pondrá en marcha a partir del año que viene y estará a pleno rendimiento en 2024. Este centro contará con laboratorios de vanguardia, donde se desarrollará todo el ciclo del almacenamiento de la energía a distintas escalas, desde la química a los ensayos de sistemas de almacenamientos.
El Centro Ibérico de Almacenamiento Energético servirá para conseguir una energía más limpia, más barata y más sostenible, y también servirá para afrontar el reto de que Europa, España y Portugal sean países con una autonomía estratégica en materia energética.
Este centro va a suponer una inversión de 74 millones de euros y va a permitir generar 150 puestos de trabajo para investigadores, profesionales y técnicos en la materia. Estará ubicado en la Finca el Cuartillo, en Cáceres. Son algo más de 11 hectáreas cedidas por la Diputación de Cáceres.